La necesidad de innovar en empresas y startups
Actualmente vivimos en una sociedad acelerada y cambiante, y las empresas conviven en un entorno empresarial que muchas veces se ha definido como un entorno VUCA (siglas de volatilidad, incertidumbre —uncertainty—, complejidad y ambigüedad). En este contexto, la innovación empresarial es imprescindible, es la necesidad de innovar en empresas y startups.
¿En qué consiste la innovación empresarial?
Según el “Manual de Oslo de la Innovación”, se entiende por innovación empresarial la concepción e implantación de cambios significativos en el producto, al proceso, el marketing o la organización de la empresa con el propósito de mejorar los resultados. Más adelante se añadió a esta definición un quinto elemento, la innovación en modelo de negocio.
Un poco más detallada tenemos la definición de los diez tipos de innovación de Doblin. En ella, Larry Kelley nos desgrana la innovación empresarial en tres bloques:
- Innovación en configuración empresarial. Sería lo referente a modelo de negocio, redes de colaboración externas, estructura organizativa, procesos internos, etc.
- Innovación en oferta de productos. Nos referimos a características de los productos (o servicios) ofrecidos por la empresa y también a productos complementarios.
- Innovación en experiencia del cliente. Esto es el servicio al cliente, los canales de distribución y comunicación, la marca de la empresa y su percepción, la interacción y el compromiso con el cliente, etc.
¿Por qué innovar en las empresas?
Alfons Cornella, fundador de Infonomia y de The Institute of Next, nos dice que hay cinco razones por las cuales una empresa debería innovar:
- Entorno. Lo que lanzas hoy al mercado, dura poco. Igual hoy te funciona, pero mañana ya no, sea por productos de la competencia o por muerte de la demanda.
- Exceso de oferta. En la actualidad hay un exceso de oferta evidente. Innovar permite la diferenciación de tu competencia.
- Respuesta a la convivencia. Cuando una empresa de un sector innova en algún sentido, el resto de organizaciones también tienen que hacerlo o se quedarán totalmente desfasadas.
- Más valor con menos recursos. Se trata de ofrecerle a tu público una solución a un problema o una mejora de una solución ya existente.
- Retención del talento. La gente se acaba aburriendo de hacer siempre el mismo trabajo.
Yo añadiría un sexto componente que es la presión de la tecnología. Actualmente, los avances tecnológicos acelerados son en buena parte los responsables de ese entorno VUCA.
¿Por qué innovar en una startup?
¿Y si una empresa es de nueva creación? ¿También debería innovar? La respuesta es que sí.
Steve Blank, en “El manual del Emprendedor”, define una startup como una organización temporal en búsqueda de un modelo de negocio escalable y replicable.
Hay dos errores que se pueden cometer en esta búsqueda, y los dos se pueden mitigar con la innovación:
- Centrarse demasiado en un producto o idea (dejar de buscar nuevas ideas).
- Organizarse como empresas tradicionales (no ser ágiles buscando ideas).
También conviene fijarse en lo que nos dice Juan Sobejano, profesor de innovación y fundador de Innodriven. Dice que las startups deben centrar todos sus procesos de innovación en la captación de información y la creación de conocimiento relevante para sus proyectos y su uso diferencial respecto a la potencial competencia.
En la innovación abierta, la colaboración nos hace más fuertes (e innovadores)
La innovación Abierta
En empresas pequeñas, ya sean startups o pymes, puede ser difícil innovar solamente contando con recursos propios. La innovación interna simplemente no tiene suficiente músculo. Es ahí donde la innovación abierta nos puede echar una mano.
Henry Chesbrough está considerado el “padre” de la idea de la innovación abierta. Dijo que la innovación abierta es un paradigma según el cual, para conseguir el avance de sus tecnologías, las compañías pueden y deben utilizar ideas externas, así como ideas internas, y también vías internas y externas hacia el mercado.
Además, la innovación abierta permite que el conocimiento fluya libremente de abajo arriba en las organizaciones, pero también de una manera bidireccional, con los partners, los proveedores y los clientes.
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foto de portada: Pexels.com – Ketut Subiyanto
