Palau Alameda
Ya han pasado cuatro años desde el inicio de todos los tramites, finalmente el Palau Alameda de Valencia, antiguo Alameda Palace, está listo. El Palau ha cambiado realmente poco, salvo la jardinería y evidentemente las mejoras con las que ha contado que en ningún caso afectarían a la estructura, desescombros y otras actuaciones. Palau Alameda son 2700 metros cuadrados de pura energía creativa. Un concepto que reúne restaurante panorámico, espectáculos y tardeo.
El edificio formaba una sola propiedad junto con Piscina Valencia, pero por motivos del concurso fueron separados en dos escrituras en el Registro. Y aunque no es un edificio protegido es uno de los más característicos del Paseo de la Alameda, enfrente del Palacio de Exposición.
El Ayuntamiento de Valencia recibirá una renta de 160.000 euros en concepto de arrendamiento y la empresa adjudicataria disfrutará de su explotación hasta 2035 (Music Resort SL).
Palau Alameda
Palau Alameda disfruta de un diseño de interiores exquisito, basado en paisajes oníricos con reminiscencias estilo valenciano. La ornamentación vegetal y la botánica rememoran la época de construcción del edificio con un distinguido contrapunto años 50.
Un claro homenaje a una tradición reinventada que se manifiesta también en el diseño de los espacios. Un homenaje a los oficios y las industrias más emblemáticas de Valencia a través de una nueva forma de expresión artística, fresca y moderna.
Reescribir la historia. Buena parte de los recuerdos de la ciudad, de las grandes citas, están entre las paredes del edificio Alameda, que se alzó en los años 50 como contrapunto estético a los laureles, los cipreses y los naranjos. Se llamó Alameda Palace y, junto a la Piscina Valencia, se convirtió en el lugar en el que había que estar. El ‘todo Valencia’ se veía allí; nuestras primeras fiestas se forjaron allí.
Álamos junto al río, dos torres, un camino que se convirtió en paso fundamental de la burguesía elegante. La Alameda de Valencia es, desde el siglo XVII, pulmón verde y espacio de referencia para la ciudad. ‘Quedamos en la Alameda’, se sigue diciendo. Un espacio detenido en un tiempo mejor. ¿En qué otro lugar del mundo se celebra una Batalla de Flores? En la Alameda (casi) todo es posible.
Atic Alameda
Àtic Restó es la sorpresa gourmet, un espacio en el que se armonizan vanguardia y tradición y dónde el producto, la técnica y la cocina de mercado serán los reyes. Una carta honesta y de calidad pero atrevida. Un restaurante panorámico para dos experiencias.
La Sala Alameda
La Sala es ahora un lugar refinado que acoge y respeta la memoria de la ciudad mientras se ve inyectado de una (gran) dosis de emoción. Esta nueva y contemporánea atmósfera es el marco perfecto para todo tipo de eventos. Todo cabe. Bodas, fiestas, eventos corporativos, encuentros, presentaciones, conciertos…
Azza
Azza, una boîte que parece recuperada del Nueva York de los años 50 con efecto WOW incorporado. El Greenwich Village neoyorquino se asienta en la Alameda. Azza un ‘hub’ urbano y cosmopolita capaz de aunar la mejor música, la coctelería premium, lo gastro y el baile. Con un pequeño toque canalla.
Piscina Valencia
La adjudicación y concesión de las obras fueron para la empresa Demmero Group 21 SL que disfrutará de la misma por un período de 45 años. Esta empresa gestiona también los polideportivos de Alfafar y la Patacona.
La piscina cubierta más antigua de la ciudad, abierta en 1963, que cerró en julio de 2014 debido a los problemas financieros del anterior concesionario, volverá a cobrar vida en el último trimestre de 2018 gracias a nueva reconversión y, sobre todo, una gran inversión, tras años de abandono.
Las nuevas instalaciones contarán con dos piscinas en la planta baja, una de 25 metros de longitud y otra de enseñanza, un balneario con duchas termales, spa de 190 metros cuadrados, sauna, baño turco, solárium y distintos espacios de agua, además de una planta semisótano de unos 200 metros cuadrados.
En tu próximo viaje a Valencia no dejes de visitarlo, ¡Hasta pronto!.