Quemaduras: qué tipos existen, cómo tratarlas y remedios caseros seguros
Las quemaduras son accidentes más comunes de lo que pensamos. Pueden ocurrir en la cocina, en el trabajo o incluso tomando el sol. Aunque muchas son leves, algunas pueden ser graves y requieren atención médica inmediata.
En este artículo te contamos los tipos de quemaduras, los tratamientos más recomendados y los remedios caseros que sí funcionan.
Tipos de quemaduras
Primer grado
- Afectan solo la capa superficial de la piel (epidermis).
- Causan enrojecimiento, dolor y, a veces, ligera hinchazón.
- Ejemplo típico: una quemadura solar.
- Se curan en menos de una semana y no dejan cicatriz.
Segundo grado
- Dañan la epidermis y parte de la dermis.
- Producen dolor intenso y ampollas llenas de líquido.
- La piel puede verse húmeda y sensible al tacto.
- Tardan de dos a tres semanas en sanar y pueden dejar marcas.
Tercer grado
- Son las más graves: destruyen todas las capas de la piel e incluso músculos o huesos.
- La piel puede verse blanca, marrón o carbonizada.
- No siempre duelen, porque los nervios suelen quedar dañados.
- Requieren atención médica inmediata y, en muchos casos, cirugía o injertos.
Qué hacer en caso de quemadura
Actuar rápido es clave. Estos son los pasos básicos:
- Enfriar la zona, coloca la piel bajo agua fresca durante 10 a 20 minutos. No uses hielo, ya que empeora la lesión.
- Proteger la herida, cubre con una gasa estéril o un paño limpio. Evita el algodón, porque se adhiere a la piel.
- No reventar las ampollas, funcionan como un vendaje natural que protege contra infecciones.
- Aliviar el dolor, medicamentos como paracetamol o ibuprofeno pueden ayudar.
Importante: si la quemadura es extensa, profunda o afecta cara, manos, pies o genitales, busca asistencia médica de inmediato.

Tratamientos médicos
En el hospital, el personal sanitario puede aplicar:
- Cremas antibacterianas para prevenir infecciones.
- Vendajes especiales que se cambian de forma periódica.
- Analgésicos más potentes si el dolor es severo.
- Injertos de piel en lesiones graves.
El seguimiento médico es vital para evitar complicaciones.
Remedios caseros: lo que sí y lo que no
En casa solemos recurrir a soluciones rápidas. Algunas son efectivas, otras no tanto. Eso sí, deben aplicarse siempre después de enfriar la piel con agua.
Remedios útiles
- Agua fresca: lo más simple y efectivo al inicio.
- Aloe vera: su gel calma, hidrata y ayuda a cicatrizar.
- Miel natural: tiene propiedades antibacterianas y favorece la curación.
Remedios a evitar
- Aceites, mantequilla o pasta de dientes: retienen el calor y pueden causar infecciones.
- Hielo directo: daña aún más los tejidos.
- Alcohol o vinagre: irritan y retrasan la recuperación.
Cómo prevenir quemaduras
Unos cuantos hábitos marcan la diferencia:
- Alejar a los niños de la cocina y de enchufes eléctricos.
- Usar guantes y gafas al manipular productos químicos.
- Regular la temperatura del agua caliente en casa.
- Usar protector solar antes de exponerse al sol.
Quemaduras
Las quemaduras pueden parecer simples, pero no siempre lo son.
- Las leves pueden tratarse en casa con agua fresca, aloe vera o miel.
- Las graves requieren atención médica inmediata.
La clave está en actuar rápido y con cuidado, y, sobre todo, en prevenir para reducir el riesgo de sufrirlas.
Si buscas información sobre qué hacer en caso de quemadura, recuerda: enfría, protege y nunca uses remedios caseros peligrosos como mantequilla o pasta de dientes. Tu piel lo agradecerá.
Foto de portada: Freepick – Juicy Fish